miércoles, 28 de junio de 2023

Mi tío Hugo

Su piel dorada por la consecuencia de  

ciertas pieles sufrientes del sol abrasivo
de la realidad sujeta a la constante 

de no saberse en algún lugar

que no sea la clase obrera.


Porque pareciese ser que el tiempo opera como un enjambre

de balas afiladas que socavan cualquier rastro

observancia plena o dificultad venidera 
los días están plagados de una negra ternura.


Suena el eco pitido de un tiempo pasado
mejorado en el vientre de la carencia

fundamentan la historia en el medio de todo

perdiendo el rastro supurante de constantemente sufrir. 


Piero su rastro entre botellas vacías rotas por bocas negras

dientes negros y esa realidad cubierta de sinsentidos
supina concentración de elementos de la naturaleza

a punto de estallar por los aires.


Encomiendo a las almas el servicio de tu búsqueda

Resguarda en la amongelatina el pulso de la patria 

Tiembla la mano por las bebidas narcóticas

Apunta al enemigo con la rabia del hambre.